La Fiscalía de Antiterrorismo no se ha hecho finalmente cargo del caso del atropellamiento masivo del carnaval de Volkmarsen, a 30 kilómetros de Kassel. Ha sido la Fiscalía ordinaria la que ha abierto oficialmente investigación esta mañana por el posible delito de intento de asesinato. La policía ha confirmado la cifra definitiva de 52 heridos, de los cuales 18 son niños. Todavía 35 personas permanecen hospitalizadas aunque ninguna de ellas está ya en peligro de muerte, mientras la investigación se centra en la motivación del conductor.
El ciudadano alemán de 29 años y con antecedentes por allanamiento y agresión no ha podido todavía ser correctamente interrogado, debido a que debe primero recuperarse de varias heridas en la cabeza. Tras atropellar a un primer grupo de niños del desfile y al llegar con el automóvil hasta la pared de un supermercado, el conductor intentó maniobrar para volver a embestir contra los peatones, ocasión que aprovecharon varios padres de las víctimas para tratar de impedírselo, propinándole golpes a través de la ventanilla del vehículo que le causaron las heridas en la cabeza.
«Naturalmente queremos saber qué hay detrás de este ataque tan terrible», se ha preguntado esta mañana Volkmarsen, alcalde de la localidad desde 1998, «pero también nos preguntamos qué va a posar ahora, cómo vamos a poder volver a celebrar el carnaval en Volkmarsen, si alguna vez volveremos a tener ánimo y valor para celebrar alguna fiesta».
